Mientras se adelanta una obra en el Centro Bolivariano, un terreno que pertenece al parque metropolitano Simón Bolívar, desde el Concejo de Bogotá se conoció una alerta emitida por varios cabildantes en las que se asegura que habría “irregularidades” en medio del proyecto, adelantado por la empresa promotora de eventos Ocesa, y que sigue avanzando en sus trabajos.
Debido a esto, los concejales Leandro Castellanos (Partido Alianza Verde), Quena Ribadeneira (Pacto Histórico) y Óscar Bastidas (Pacto Histórico) formaron una Comisión Accidental para investigar y monitorear la situación, debido a que “ellos no pueden estar haciendo nada si no tienen las licencias urbanísticas ni de construcción”.
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Debido a esta situación, Infobae Colombia habló con uno de los representantes y con Ocesa, quien dio su explicación y argumentó que ellos están amparados bajo el soporte técnico y legal para llevar a cabo el proyecto que, se busca, sea un espacio que se pueda aprovechar para la realización de eventos culturales.
Este proyecto, denominado Distrito Verde, “nace como respuesta a esa demanda, ofreciendo un lugar donde la cultura y la naturaleza se entrelazan para brindar experiencias únicas”, explicó Ocesa, quien agregó este predio está clasificado por el POT (Plan de Ordenamiento Territorial) “como parte de la Estructura Ecológica principal de la ciudad”. Este espacio deberá ser destinado a ser “contemplativo para la realización de actividades recreativas y culturales y el disfrute ambiental”.
Estos terrenos se hallan en la localidad de Teusaquillo en inmediaciones al barrio El Greco, desde la calle 26 hasta la calle 53, entre carreras 60 (avenida La Esmeralda) y la carrera 66A.
En su comunicado, los cabildantes explicaron que:
- En febrero de 2024 se detectaron intervenciones no autorizadas por parte de OCESA Colombia S.A.S., una empresa de entretenimiento, a través de imágenes y videos proporcionados por residentes locales.
- Las actividades de construcción, que incluyen desmonte, excavación y pavimentación, parecen estar procediendo sin los permisos y autorizaciones adecuados requeridos por el Plan Maestro del Parque Metropolitano Simón Bolívar.
- Aunque Ocesa afirma tener un concepto de uso del suelo de la curaduría urbana y de la Secretaría Distrital de Planeación, esto no constituye una licencia de urbanismo válida.
- El proyecto carece de la aprobación del Comité Director del Parque Simón Bolívar, un paso necesario para cualquier intervención urbanística en el parque.
- Se han planteado preocupaciones sobre posibles violaciones al Plan de Ordenamiento Territorial (POT) de la ciudad y los impactos ambientales en lo que algunos estudios sugieren que podría ser un terreno ecológicamente significativo, a pesar de que la Secretaría Distrital de Ambiente afirma que el área no es un humedal.
Los argumentos de Ocesa para seguir con la obra adelante
Frente a la situación que dieron a conocer los cabildantes, Ocesa expresó que “las adecuaciones en el terreno consistentes en movimiento de tierras e instalación de una estructura modular, no convencional, en los predios conocidos como el “Centro Bolivariano”, cuya naturaleza es de bienes fiscales destinados para uso privado y son propiedad de la Beneficiencia de Cundinamarca y de la Gobernación de Cundinamarca, no requieren de autorización, licencia o permiso previo”, comentó Luz Ángela Castro, directora ejecutiva (CEO) de Ocesa en Colombia.
De igual forma aseveraron que “no hay intervención urbanística ni de construcción”, al detallar que “los trabajos que se han realizado consisten en la adaptación del terreno para la instalación de estructuras móviles, modulares, temporales y la preparación para la implementación de un diseño paisajístico, que ya está siendo sujeto de revisión por parte de Secretaría Distrital de Ambiente, y permitirá activar ecológicamente estos predios”.
Otro punto importante que se debe tener en cuenta, es que según la normativa esta área deberá estar dividida en una relación de lugar donde el 75% de la zonas verdes se deberán conservar, dado que “activarán la función ecológica del espacio, fortaleciendo la seguridad y la valorización paisajística”, añadió Ocesa, quien afirmó que el otro 25% será compuesto por zonas duras, “con un 10% de cobertura arbórea en superficie”, que será utilizado para fijar estructuras modulares temporales para distintos formatos de eventos.
Otro de los puntos en los cuales se ampara la empresa promotora de eventos para realizar esta obra, que dicho sea de paso se realiza con inversión de privados, es que según “el mismo Ministerio de Vivienda indica que si el movimiento de tierras no se efectúa con el objeto de habilitar una estructura que estará destinada a la ocupación o habitación, no será necesario obtener licencia de construcción y por ende no se requerirá autorización para el movimiento de tierras”.
Para seguir con la revisión de lineamientos y permisos necesarios para proceder con los trabajos de remoción de tierra, “de acuerdo con la normatividad para la naturaleza de estos predios, bienes fiscales destinados a uso privado y propuestos como parte de la Red Estructurante de Parques Contemplativos (establecido en el POT), así como para el tipo de estructuras modulares no convencionales, no se exige permisos ni licencias”, cerró Castro.
La directora ejecutiva de Ocesa aseguró que no tienen nada que ocultar y que todo se ha realizado según las normas y el lineamiento legal que establecen las autoridades distritales y nacionales. Por lo que estarán abiertos a responder las dudas que expresaron los cabildantes, quienes seguirán poniéndole la lupa a los avances y lo que pueda ocurrir en esta obra.
