El posible traspaso de Miguel Ángel Borja a Boca Juniors ha generado un fuerte impacto en el fútbol argentino, ya que el delantero colombiano, con contrato vigente en River Plate, se perfila para reforzar la delantera xeneize en la próxima temporada. La operación, que podría concretarse a partir del 1 de enero, no solo tendría consecuencias deportivas, sino que también recibió el visto bueno de un histórico que vistió las dos camisetas: Oscar Ruggeri.
En el tramo final de su contrato con River, que expira el 31 de diciembre, el ariete se encuentra habilitado para negociar con otras instituciones, aunque solo podrá disponer de su ficha a partir de enero. Esta situación pospone cualquier definición relevante hasta el inicio de 2026, cuando el plantel de Boca Juniors retome los entrenamientos el 2 de enero en el predio de Ezeiza. Hasta ese momento, el delantero puede dialogar con otros clubes, pero no firmar un nuevo contrato, lo que mantiene en vilo a los hinchas de ambos equipos. De hecho, algún sondeo o aproximación hubo.
Ante ese panorama, en el ciclo F90 de ESPN, donde es panelista, el ex defensor recordó que él también pasó por una situación similar, aunque fue de manera opuesta, e indicó: “Sí pateó tres pelotas en River (Borja). ¿Qué le va a pasar? ¿Cómo no va a ir? Va a ir, seguramente».

Y luego agregó: “Sí lo llaman, va a ir. ¿Y la gente qué va a hacer? Nada, si ahora no hay visitantes». Además, sostuvo que el colombiano no quedó marcado en la historia del elenco de Núñez, al margen de que hizo una buena cantidad de goles.
El primer acercamiento entre Boca Juniors y el entorno de Borja se produjo antes de la entrevista que el atacante concedió a ESPN el jueves pasado. En esa ocasión, el colombiano sorprendió al no descartar la posibilidad de vestir la camiseta azul y oro, lo que alimentó las versiones sobre el interés concreto del club de la Ribera. Borja declaró: “Uno no puede cerrar las puertas”, en referencia a la chance de sumarse al equipo rival.
La posibilidad de que Borja cruce directamente de River a Boca representa un desafío tanto en lo deportivo como en lo simbólico. El delantero, que antes de llegar a Núñez ya había estado cerca de firmar con el Xeneize en varias oportunidades, se consolidó como goleador y fue protagonista en superclásicos, lo que en su momento hacía inviable cualquier negociación. Sin embargo, su salida del club de Núñez y el distanciamiento con la hinchada abrieron un nuevo escenario, en el que la sed de revancha y la oportunidad de relanzar su carrera en el máximo rival cobran fuerza.
El interés de Boca no es exclusivo, ya que desde México, clubes como Cruz Azul también han mostrado interés en Borja. No obstante, la relevancia deportiva de un traspaso a Boca podría equilibrar la balanza frente a ofertas económicamente superiores. El propio Juan Román Riquelme evalúa avanzar con una propuesta formal en los próximos días, lo que podría acelerar las negociaciones.
Por ahora, no existen negociaciones formales, pero el inicio de los contactos ya marca un punto de inflexión en una historia que promete nuevos capítulos. El simple hecho de que ambas partes hayan comenzado a dialogar convierte a Borja en el principal candidato para ocupar la camiseta número nueve de Boca en la próxima temporada.







