El estoicismo, una filosofía nacida hace más de dos milenios en la antigua Grecia, apareció en uno de los momentos más oscuros de la vida del entrenador Luis Enrique. En agosto de 2019, el técnico español anunció la pérdida de su hija Xana, de solo 9 años, a causa de un osteosarcoma. La noticia sacudió al mundo del deporte y también marcó un antes y un después en su camino personal.
En lugar de sucumbir ante el dolor, emprendió un proceso silencioso de transformación. El encuentro con la filosofía estoica fue decisivo: le ofreció herramientas para aceptar el sufrimiento, canalizar su energía hacia lo esencial y reconstruir su propósito vital. En entrevistas y transmisiones personales, el ahora campeón de la UEFA Champions League con el Paris Saint-Germain ha reconocido que esta corriente de pensamiento se convirtió en un refugio intelectual y emocional.
Durante el Mundial de Qatar 2022, Luis Enrique sorprendió al público al compartir en sus transmisiones en Twitch su fascinación por los pensadores estoicos y su impacto en su vida.
En una de estas retransmisiones, el entrenador confesó estar “completamente obsesionado con leer a los clásicos estoicos y todo lo que tiene que ver con el estoicismo”.
Además, explicó cómo estas ideas le inspiran en su trabajo como entrenador, apuntando reflexiones en una libreta para aplicarlas en su equipo.
En ese contexto, recomendó el libro “El hombre en busca de sentido”, del psiquiatra y superviviente del Holocausto Viktor Frankl, describiéndolo como una “lección existencial”. Este libro, publicado en 1946, sigue siendo un éxito de ventas, acumulando más de 22.000 valoraciones en plataformas como Amazon.
El estoicismo, una corriente filosófica que se remonta a más de 2.000 años, ha ganado popularidad en los últimos años, especialmente en tiempos de crisis.
Pedro Vivar, entrenador personal, divulgador, conferenciante y creador de distintos proyectos conectados al estoicismo como Diario Estoico, esta filosofía ofrece herramientas para afrontar el sufrimiento, encontrar serenidad y mantener el autocontrol en situaciones adversas.
A menudo malinterpretado como una doctrina que promueve la ausencia de emociones, el estoicismo en realidad se centra en virtudes como la templanza, la justicia, el coraje y la sabiduría.
Luis Enrique, consciente de estas confusiones, subrayó la importancia de informarse adecuadamente sobre esta filosofía, que tiene como referentes a pensadores como Marco Aurelio, Séneca y Epicteto.
El impacto del estoicismo en la vida de Luis Enrique no se limita a su ámbito personal. Según detalló el entrenador en sus trasmisiones, ha encontrado en esta filosofía una guía para liderar a sus jugadores, ayudándoles a enfrentar la presión y las adversidades del deporte de alto nivel.
Este enfoque, que combina introspección y resiliencia, ha sido fundamental en su proceso de transformación personal tras la pérdida de su hija. En lugar de rendirse ante el dolor, el técnico ha adoptado una perspectiva basada en la aceptación y la búsqueda de sentido, pilares fundamentales del pensamiento estoico.
Según El Confidencial, además del ámbito literario, el estoicismo ha encontrado eco en figuras destacadas de diversos sectores.
En el mundo empresarial, nombres como Jack Dorsey, ex-CEO de Twitter, y Jeff Bezos, fundador de Amazon, han mostrado interés en esta filosofía.
Además, el medio español detalló que en el ámbito deportivo, el exjugador de baloncesto Pau Gasol también ha explorado el estoicismo como una forma de complementar su interés en el budismo. Según contó Pedro Vivar a El Confidencial, esta corriente filosófica resulta atractiva para muchos occidentales debido a su conexión con la ética cristiana y su enfoque práctico.
El resurgimiento del estoicismo también ha sido impulsado por las redes sociales y plataformas digitales. En espacios como TikTok, influencers han popularizado los principios estoicos, adaptándolos a las necesidades de una audiencia contemporánea.
Este fenómeno ha llevado a un aumento en la publicación de libros y contenidos relacionados con esta filosofía, consolidándola como una herramienta relevante para enfrentar los desafíos del mundo moderno.
Pero lo más importante es que gracias a este libro, el reciente entrenador campeón de la UEFA Champions League, pudo sanar un poco el fallecimiento de su hija en 2019.
