En el marco de la F1 Masters Racing Legends, competición que organiza carreras oficiales con autos que hicieron historia en el automovilismo, el icónico Williams FW07C de 1981 de Carlos Reutemann quedó envuelto en un accidente. Al mismo tiempo que la Fórmula 1 terminaba su temporada en el Gran Premio de Abu Dhabi, se realizaron dos pruebas con monoplazas antiguos en las que participó el vehículo con el que el argentino consiguió el subcampeonato en la Máxima.
El cierre de la temporada 2025 de la Masters Historic Racing en el Circuito Yas Marina de Abu Dabi dejó imágenes que generaron intensas emociones a los fanáticos del Lole, especialmente tras el accidente que involucró a dos de los autos más emblemáticos de la F1 clásica.
En la segunda carrera del fin de semana, Mark Hazell, al mando de un Tyrrell 011B de 1982, fue embestido por Mike Cantillon, quien conducía el histórico Williams FW07C de 1981, el mismo modelo que llevó a Reutemann al subcampeonato mundial que perdió en manos de Nelson Piquet en la última carrera (GP de Las Vegas).
Más allá de que el accidente no fue excesivamente fuerte, el choque eliminó a ambos pilotos de la competencia y provocó daños en vehículos que representan un legado invaluable para el automovilismo. El Williams FW07C está en la pista con set up aerodinámico de la segunda mitad de la temporada 81. Es decir, que rueda exactamente como el coche con el que Reutemann corrió en Las Vegas.
En el año 1981, Lole lideró el campeonato en soledad desde la tercera fecha corrida en nuestro país, hasta el cierre disputado en un efímero trazado que albergó a la Máxima, armado en el estacionamiento del hotel Caesars Palace de Las Vegas, en los Estados Unidos. Aquella tarde de sábado fue el corolario de una historia agridulce para el santafesino. Finalmente, perdió el campeonato por un punto de diferencia contra Piquet.

Vale recordar que en la F1 Histórica suelen competir los dueños de los monoplazas, los cuales, en su mayoría, los adquirieron en subastas de las propias escuderías. Los equipos suelen optar por vender vehículos históricos a un elevado precio para afrontar gastos. Uno de los últimos casos fue el de Williams, que en 2020, en medio de un contexto económico complejo, liquidó varios autos que fueron adquiridos por Doriltol Capital.
La cita en Abu Dabi marcó el final de una temporada compuesta por siete eventos, en la que la Masters Racing Legends revivió la época dorada de la Fórmula 1, comprendida entre 1966 y 1985. Según la organización, la parrilla de este fin de semana destacó por la presencia de Williams como único fabricante con representación tanto en la categoría histórica como en la actual Fórmula 1, lo que subraya una continuidad poco habitual en la historia del deporte. La organización expresó su agradecimiento a pilotos, equipos, socios y seguidores por el compromiso demostrado a lo largo del año.
El sábado, la primera carrera estableció un alto nivel de competencia. Stuart Hall, al volante de un Shadow DN8 de 1977 del equipo OC Racing, se impuso en una ajustada batalla, seguido por Oliver James Webb (Fittipaldi F8 de 1980, G-CAT Racing) y Christophe D’Ansembourg (Williams FW07C de 1981, Front Row Racing). El evento también incluyó un intenso duelo entre John Turner (ATS HS1 de 1978, Creation Auto) y Frédéric Fatien (Hesketh 308B de 1974, MJ Tech).
El domingo, la segunda carrera ofreció una de las actuaciones más notables de la temporada. Jamie Constable, con un Tyrrell 011 de 1982 de Front Row Racing, logró una remontada sobresaliente desde el último lugar de la parrilla hasta la victoria. Mike Cantillon también protagonizó una recuperación destacada, asegurando el segundo puesto tras partir desde atrás debido a los incidentes del día anterior. Stuart Hall completó el podio, consolidando su protagonismo durante el fin de semana.







