El plantel de Juventud Unida de Tafí Viejo fue atacado tras empatar 0-0 con La Providencia. Edino Alderete relató los momentos de miedo y tensión.
Con la tranquilidad de haber asegurado la permanencia en Primera, Juventud Unida de Tafí Viejo cerró su participación con un empate 0-0 ante La Providencia. Sin embargo, el resultado desató una ola de violencia que dejó a dirigentes, jugadores y allegados de la “Juve” viviendo una verdadera pesadilla.
El presidente del club taficeño, Edino Alderete, contó los dramáticos momentos que atravesaron tras el final del partido, ocurrido en el estadio de Río Seco.
“Nos encerramos en el vestuario durante una hora”
“Terminó el partido y nos encerramos en el vestuario, ahí estuvimos cerca de una hora”, relató Alderete. La situación se tornó crítica cuando la Comisión Directiva de La Providencia habría abierto los portones del estadio, permitiendo el ingreso de los hinchas locales al campo de juego.
“La Comisión Directiva sacó los candados y abrió las puertas para que entren sus hinchas. Fue ahí cuando la Policía nos encerró en el vestuario para protegernos”, denunció el dirigente.
Golpes, piedras y bombas de estruendo
Alderete contó que él y su padre fueron agredidos. “Me pegaron un palazo en el ojo y a mi papá lo hirieron en el brazo. En el vestuario nos tiraron palos, piedras, bombas de estruendo y también de humo. Tuvimos que arrinconarnos en una esquina para resguardarnos”, expresó con visible preocupación.
“Nunca sentí tanto miedo como hoy”, confesó.
“Pensamos lo peor”
Según el presidente de Juventud Unida, el club había llevado seis Infantes y tres policías previendo posibles incidentes. “En el vestuario escuchamos detonaciones de los efectivos, pero realmente no podían parar a la hinchada y pensamos lo peor”, explicó.
La salida del estadio fue otro momento crítico: “Hicimos casi 100 metros corriendo y recibiendo pedradas por todos lados. Y ya en la ruta hubo motos que nos seguían tirándonos hondazos”, describió.
Un gesto que evitó una tragedia
A pesar del caos, Alderete destacó el comportamiento de los jugadores de La Providencia, quienes intervinieron para frenar la violencia.
“Los jugadores de ellos se pusieron a frenar el quilombo y se metieron a agarrar la gente. De otra forma hubiera sido mucho peor”, señaló.
Fuente: Tafí Viejo Deportivo
