Ocho decisiones que transforman la crianza: el arte de guiar sin imponer

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Este martes 25 de noviembre, en el marco del programa Libertad de Expresión (Radio Rock & Pop Tucumán, 106.9 FM), se emitió una nueva edición de la columna Conectando, a cargo del comunicador y docente Pablo Gerez.

La emisión, que se transmite semanalmente los martes a las 8:30, tuvo como eje central ocho decisiones consideradas relevantes en el acompañamiento de la infancia, según aportes de la psicología del desarrollo, la neurociencia y la pedagogía contemporánea.

Gerez comenzó señalando que guiar a los niños implica ejercer decisiones cotidianas que alternan firmeza y flexibilidad, sin confundirse con imposición o control. A continuación, desarrolló los ocho puntos:

«Guiar no es imponer. Es decidir, día a día, qué sostener con firmeza y qué ceder con ternura.»

Intervención frente al uso de pantallas: Se destacó que los entornos digitales activan el sistema de recompensa cerebral, pero no enseñan autorregulación. Citando al investigador Allan Schore, se señaló que la capacidad de autoregulación se construye a partir de experiencias previas de regulación interpersonal.

Valorización del aburrimiento: Se mencionó que el estado cerebral conocido como modo default —activo en ausencia de estímulos externos— favorece la creatividad y la introspección. Se propuso permitir momentos sin actividades programadas como parte del desarrollo cognitivo.

«Lo que llamamos “autocontrol” no nace de la represión, sino de haber sido regulado primero por otro: en los brazos, en la voz, en la presencia atenta de quien cuida.»

Participación en tareas domésticas: Haciendo referencia a Donald Winnicott, se indicó que la implicación en actividades cotidianas contribuye al sentido de pertenencia y a la construcción de agencia personal.

Protección del espacio de la mesa compartida: Citando la teoría polivagal de Stephen Porges, se explicó que las interacciones cara a cara durante las comidas activan respuestas de seguridad en el sistema nervioso, favoreciendo la co-regulación emocional.

«Un límite no es una pared: es un contenedor. Y los contenedores permiten que el niño explore con seguridad.»

Abordaje temprano de temas complejos: Se sostuvo que el silencio ante temas difíciles no es neutral, y que anticipar conversaciones —ajustadas a la edad— permite que los niños construyan criterio propio con acompañamiento adulto.

Sostenimiento de límites coherentes: Se diferenció entre límites rígidos y límites firmes, señalando que estos últimos —predecibles y explicados— se asocian con mayor seguridad emocional en la infancia.

«No basta decir “lo siento”: ayuda que acompañen la disculpa con un gesto concreto de reparación. Así, el perdón deja de ser una palabra y se vuelve un puente.»

Enseñanza de la reparación: Se planteó que la capacidad de hacerse cargo de los errores y restablecer vínculos es una competencia socioemocional que se aprende desde temprano, más allá de la disculpa verbal.

Aceptación de la resistencia como parte de la guía: Se concluyó que criar con intención implica sostener decisiones aun frente a fricciones, sin evitación ni sobreexigencia.

Como cierre, Gerez incluyó una referencia a una metáfora de la cosmovisión andina sobre semillas guardadas bajo la ceniza tras una quema —una imagen utilizada en talleres comunitarios del noroeste argentino para hablar de esperanza y resiliencia en contextos adversos.

La columna Conectando se encuentra disponible en formato podcast en plataformas digitales y se emite semanalmente dentro de Libertad de Expresión.

 

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