Cómo llega el Gobierno a las elecciones: el clima en Casa Rosada, sondeos propios y el factor para ganar

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Javier Milei durante el cierre de campaña en Moreno (Jaime Olivos)

En Casa Rosada hay un optimismo notable al respecto de las próximas elecciones en la provincia de Buenos Aires. El clima no abundaba en absoluto hasta hace una semana, cuando el escándalo de los audios copaba la agenda mediática. Y es que la desmovilización y el aplacamiento se reconvirtió, al punto que en las filas más cercanas a Javier Milei no relevan otro pronóstico que “empate técnico”.

Entre ayer y hoy crecieron un 50 por ciento las búsquedas del padrón. Esas son muy buenas noticias”, reflexionaba un altísimo funcionario en una reunión con armadores de La Libertad Avanza en Casa Rosada. En su hipótesis electoral, una mayor participación podría traerle un mejor resultado al oficialismo. “Esos son los desmovilizados y los hastiados de la política que, tal vez, puedan votar mirando el estado de su Provincia”, afirmaba un colaborador libertario, que coincidía que ese factor es el que puede determinar una diferencia respecto al aparato de los intendentes kirchneristas en la Primera y Tercera.

En laboratorio electoral libertario estiman que el ausentismo de estos comicios será mayor al 40%, a tono con el clima de hastío político que evidenció el electorado en diferentes puntos del país. “Aun así, en los últimos días habría crecido la cantidad que le interesa movilizarse”, reflexionó un funcionario en diálogo con Infobae.

¿Qué pudo haber hecho que crezca el interés por estas elecciones? Hasta hace pocos días, la queja de los principales referentes libertarios y del PRO era que no había clima de campaña. La Libertad Avanza venía golpeada por el escándalo de los audios de las presuntas coimas. La campaña estaba paralizada.

“La narrativa no existía. Nuestros candidatos tuvieron que dejar de aparecer, se frenó la coordinación de la campaña y la militancia estaba desmotivada por las cargadas en la calle y en las redes”, afirmaba un armador de la campaña.

Pareciera que hubo dos puntos de inflexión. El primero fue la suspensión de la caravana de Milei en Lomas de Zamora por los piedrazos de militantes opositores. Las internas que se exhibían (y se exhiben) en el Gobierno se frenaron por un instante para salir a apuntar contra el kirchnerismo. El segundo fue la revelación de los audios de Karina Milei presuntamente grabados en la Casa Rosada. Las tribus libertarias se abroquelaron a pesar de las diferencias sobre una misma narrativa y apuntaron a una operación de inteligencia opositora.

Todo confluyó en el cierre de campaña de La Libertad Avanza en Moreno. Las idas y vuelta con el Ministerio de Seguridad bonaerense sobre los peligros potenciales que implicaba ese evento dieron la centralidad suficiente como para que ese cierre se instalara durante toda la jornada.

“Queremos que los bonaerenses dejen de temer. Queremos que el kirchnerismo no pueda nunca más quitarles sus sueños. Necesitamos que vayan a votar y se animen a votar por un futuro distinto. No dejen que los voceros de la política les digan que son todos los mismos y no valen nada. Vota a La Libertad Avanza para frenar a Kicillof y pintemos de violeta la provincia”, cerró el jefe de Estado.

El Presidente junto a su hermana Karina, envuelta en la polémica de las presuntas coimas en la ANDIS (REUTERS)

El foco de luz que se posaba sobre el oficialismo terminó de correrse de las acusaciones de coimas hacia la campaña electoral justo a tiempo. O al menos así lo perciben varios colaboradores gubernamentales. Aun así, no son pocos los que eran escépticos y afirmaban que no estaba “tan claro que [los audios] afectaran la decisión de voto” de los bonaerenses.

“En 2017, Cambiemos hizo una elección tremenda y estaba atravesada por el caso de Santiago Maldonado”, ejemplificó un armador de Sebastián Pareja. En el entorno de Santiago Caputo lo veían casi como una cuestión aritmética: “No hay alternativas a La Libertad Avanza y ningún votante del kirchnerismo es un votante arrepentido nuestro”.

El Gobierno instaló en la previa de los comicios que La Libertad Avanza está en empate técnico con Fuerza Patria. Una jugada arriesgada y que genera expectativas hacia afuera. Al inicio de formalizada la alianza con el PRO, la mayoría de los pronósticos oficiales aseguraban una holgada victoria contra el kirchnerismo. Eso se fue matizando con el pasar de las semanas al calor de los escándalos recientes.

En el entorno presidencial tienen dos escenarios ventajosos posibles. Una victoria ya es visto como un logro, sea la magnitud que sea. Y una derrota de hasta cuatro o cinco puntos de diferencia también lo perciben como algo no tan negativo.

“Son dos o tres puntos de margen de error. Ellos están levemente por arriba, pero eso está dentro del margen. Una derrota dentro de los parámetros puede motivar a votar para las generales”, indicó una fuente inobjetable de la Casa de Gobierno.

El Gobierno augura victorias amplias en la Quinta y Sexta Sección Electoral. En algunos municipios perciben más de 20 puntos de ventaja. Más moderados -pero con números favorables- son las expectativas sobre la Segunda, la Cuarta y la Séptima. En la Octava dicen que están “palo y palo”, mientras que en la Primera esperan ganar por una ventaja que les permita ayudar a compensar la segura derrota en la Tercera.

Santiago Caputo (Jaime Olivos)

A los estrategas comunicacionales de la Casa Rosada les importa que la mayor cantidad de secciones quedan pintadas de violeta para poder mostrarlo en la foto de los diarios del lunes. Aun así, el dato más importante será el número global de votos a nivel provincial, que puede dar pistas de lo que suceda en los comicios del próximo mes.

Y es que poco le importa a la cúpula del Ejecutivo las bancas en los concejos deliberantes y en el Legislativo provincial. El resultado del domingo reflejará la correlación de fuerzas entre las dos alianzas políticas de cara a las elecciones generales de octubre, que definirá la composición del Congreso para los últimos dos años del mandato de Milei.

Un buen escenario catapultará las expectativas en los mercados, pero para varios integrantes del oficialismo no resolverá los problemas políticos de fondo que tiene el Gobierno. Es por eso que un escenario negativo en estos comicios genera un amplísimo temor en la repercusión que pueda tener en las pantallas bursátiles y que esto, por caso, retroalimente la crisis de coordinación y diligencia política libertaria.

No es una novedad los lazos rotos entre el sector vinculado a la hermana presidencial Karina Milei y el del asesor Santiago Caputo, que ahora se insultan abiertamente en redes a través de cuentas anónimas. Sí lo resultó el careo que hubo entre el jefe de las milicias digitales, Daniel Parisini (conocido como “el Gordo Dan”) y el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, a partir del impactante tuit de este primero sobre el senador Luis Juez.

En las bases digitales de Las Fuerzas del Cielo festejaron la actitud de “el Gordo”, recuperando la irreverencia que caracterizaba a estas cuentas en los albores de las campañas del 2021 y el 2023. “Nosotros ganamos sin mucha territorialidad”, esgrimen. Las imágenes con encapuchados y el armado en la calle pertenece a la órbita del karinismo, esgrimen. Buscan que se entienda que “las forman de las redes” las definen ellos.

Hubo gestiones internas para tratar de desescalar el conflicto con Francos. No había dimensión de si esto podía impactar en el vínculo entre el asesor y el ministro coordinador. De no encontrar un consenso interno, estos episodios tienen posibilidad de replicarse en el futuro; más aún si los tuiteros libertarios deciden apostar por ser más intransigentes de cara a las próximas semanas. Una fuente de diálogo diario con el Presidente asegura que podría ser transitorio y que, en todo caso, “octubre va a ser ordenador”. Ver para creer.

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